De Becarios a Agentes de Cambio: La Transformación Social de Casa YMCA para Becarios Camohmila
📅 5 de diciembre de 2024, 03:18pm
👤Redacción El Industrial
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A los siete años, Elia Sandoval cruzaba un río cada lunes para llegar al campamento Casa YMCA para Becarios Camohmila en Tepoztlán, Morelos.
Proveniente de una familia de escasos recursos, Elia encontró en este programa del YMCA una oportunidad que cambió el rumbo de su vida. Lo que hace su historia aún más especial es que su madre también fue becaria del YMCA cuando cursaba la secundaria, demostrando cómo las acciones de esta organización generan impactos duraderos en familias y comunidades. Hoy, Elia, con una licenciatura en Ingeniería en Tecnología Ambiental y una especialidad, coordina el mismo programa que la formó. "Sé lo que significa para los niños porque yo soy prueba de que este lugar transforma vidas", comparte con emoción.
Su caso es un ejemplo claro de cómo el YMCA contribuye no solo al desarrollo individual, sino a la creación de agentes de cambio que inspiran a otros.
El caso de Abelardo, otro ex becario y ahora también coordinador del mismo programa, refleja la misma esencia. Ingresó al campamento a los siete años, completó la preparatoria y, gracias al programa, estudió Ciencias del Deporte en la Universidad YMCA. Actualmente tiene una maestría en Administración de Negocios y dedica su vida a retribuir lo que recibió.
"Este programa no solo me dio educación; me enseñó a soñar en grande y a tener valores sólidos", afirma.
__YMCA: Más de un Siglo Transformando Vidas __
La Asociación Cristiana de Jóvenes (YMCA), fundada hace más de 180 años, es una organización global dedicada a promover el desarrollo integral de las personas a través de programas que fortalecen el espíritu, la mente y el cuerpo. En México, YMCA ha operado durante más de un siglo, brindando apoyo en áreas como educación, desarrollo comunitario, deportes y liderazgo juvenil.
Dentro de sus iniciativas, Casa YMCA para Becarios Camohmila es uno de los programas más emblemáticos.
Fundado hace 80 años, este campamento en Tepoztlán, Morelos, ofrece apoyo integral a niñas, niños y jóvenes de comunidades marginadas del estado y municipios aledaños. Más que un campamento, es un espacio que brinda oportunidades educativas, sociales y de desarrollo personal para romper los ciclos de desigualdad.
El programa está dividido en dos principales etapas:
Becarios Menores: Dirigido a niñas y niños de 7 a 15 años, ofrece hospedaje de lunes a viernes, alimentación balanceada, atención médica y psicológica, útiles escolares, actividades deportivas y culturales, y reforzamiento académico, incluyendo clases de inglés.
Becarios Juveniles: Diseñado para quienes concluyen la etapa anterior y desean continuar sus estudios superiores, con becas completas para la Universidad YMCA u otras instituciones, además de apoyo para transporte y materiales educativos.
El objetivo principal es que los becarios no solo mejoren sus vidas, sino que se conviertan en agentes de cambio en sus comunidades. La formación integral que reciben abarca no solo lo académico, sino también valores como la disciplina, el trabajo en equipo y el compromiso social.
Un Año de Logros: Clausura de la Campaña de Becarios 2024
Este año, la campaña de recaudación de fondos de Casa YMCA para Becarios está alcanzando un hito significativo de $1 millón 500 mil pesos, que se destinarán al apoyo de los 69 niñas, niños y jóvenes becarios del programa. Sin embargo, la meta no se detiene ahí.
El campamento tiene capacidad para atender a 100 becarios, y el objetivo para el próximo año es reunir los recursos necesarios para brindar más oportunidades a más menores y transformar sus vidas.
Casa YMCA para Becarios Camohmila: Más que un CampamentoDesde hace más de 80 años, este programa del YMCA México ha sido un lugar de crecimiento para niñas, niños y jóvenes de comunidades marginadas del estado de Morelos. Actualmente, 42 menores y 27 jóvenes forman parte de los dos programas principales:
1. Becarios Menores: Un Hogar de Lunes a ViernesDirigido a niñas y niños de 7 a 15 años, este programa les ofrece: Hospedaje y alimentación: Los menores viven en el campamento de lunes a viernes, con una dieta nutritiva diseñada por una nutrióloga.
Uniformes y útiles escolares: Garantizando que puedan asistir a escuelas públicas con todo lo necesario.
Atención médica y psicológica: Para cuidar tanto su salud física como su bienestar emocional.
Reforzamiento escolar y actividades recreativas:
Incluyen deportes, natación, talleres de lectura y clases de inglés tres veces por semana.
De lunes a viernes, los niños asisten a escuelas públicas por las mañanas y regresan al campamento por las tardes, donde se les brinda una estructura de vida que incluye horarios establecidos, hábitos saludables y apoyo académico.
La rutina está diseñada para fomentar la disciplina y la convivencia en igualdad de condiciones, algo que impactó profundamente a Elia, quien refiere que "en el campamento no había diferencias de género.
Todos colaborábamos en las tareas por igual. Eso contrastaba con mi casa, donde las mujeres debían atender a los hombres. Aquí aprendí sobre igualdad y trabajo en equipo", incluso recuerda que su hermana mayor pidió permiso a su papá para estudiar luego que concluyó su bachillerato, lo que a ella le asombró cuando lo concientizo, pues para Elía era algo natural seguir estudiando a nivel profesional y nunca pidió permiso, como sigue sucediendo en su comunidad.
Las actividades recreativas y educativas también son un pilar del programa: deportes, talleres de lectura, clases de inglés y campamentos son parte de su formación. Además, reciben atención psicológica para abordar las situaciones complejas que muchos enfrentan en sus hogares.
Este entorno estructurado inculca en los becarios hábitos y valores fundamentales para su desarrollo. "En el campamento aprendí a seguir rutinas, a organizarme y a convivir en un espacio donde todos contribuíamos al bienestar colectivo", recuerda Elia.
2. Becarios Juveniles :Extendiendo el ImpactoLos jóvenes que concluyen el programa para menores y desean continuar con estudios superiores pueden acceder a:
Becas económicas: que utilizan para cubrir costos de materiales educativos, transporte y eventos relacionados con su formación académica.
Apoyo para estudiar la universidad: Incluyendo el acceso a la Universidad YMCA con una beca completa.
Vinculación laboral: Muchos exbecarios se convierten en mentores dentro del campamento, ayudando en actividades y sirviendo como modelos a seguir para los más pequeños. Abelardo destaca que el programa no termina cuando los menores dejan el campamento.
Los Becarios Juveniles, que continúan con sus estudios superiores, reciben apoyo económico para cubrir materiales, transporte y 100 % de la Universidad del YMCA si deciden estudiar ahí.
A cambio, estos jóvenes regresan al campamento entre semana para apoyar como mentores y líderes en actividades recreativas y educativas durante el periodo que reciben este beneficio de la Guay."Es inspirador ver cómo los ex becarios vuelven para enseñar a los niños.
Ellos mismos son un ejemplo de que es posible salir adelante", comenta Abelardo.
Historias de Éxito que InspiranEntre los casos destacados, se encuentra César Arturo Torres Rosas, quien llegó al campamento cuando cursaba la primaria y encontró en Casa YMCA su segunda casa durante 10 años. Gracias al apoyo recibido, estudió Nutrición y actualmente trabaja como chef en Quebec, Canadá, mientras continúa su desarrollo profesional estudiando francés.
Otro exbecario, ahora residente en Estados Unidos, también decidió retribuir lo que el programa hizo por él. Hace poco, realizó un donativo significativo al programa como muestra de agradecimiento por el apoyo que transformó su vida.
Elia, Abelardo y muchos otros becarios son ejemplos vivos del impacto positivo y transformador de Casa YMCA. Historias como la de ellos y exbecarios que ahora apoyan como mentores y colaboradores, destacan la profundidad y alcance de este programa.
El impacto del programa no termina con los niños y jóvenes que participan en él. Gracias a este programa, más de 38 exbecarios han alcanzado en los últimos años títulos profesionales en diversas áreas. Pero para Elia y Abelardo, el éxito no se mide solo en diplomas. "Nuestro mayor logro es ver a estos niños y jóvenes convertirse en personas seguras, responsables y comprometidas con su entorno", afirma Elia.
Construyendo un Futuro Mejor
Bajo la coordinación de exbecarios como Elia y Abelardo, Casa YMCA ha evolucionado para ser un referente en programas educativos y de transformación social en México.
La participación activa de las familias de los becarios en “faenas”, donde los padres y tutores participan en acciones de mantenimiento de algunas áreas del campamento, refuerza los lazos comunitarios, logrando que el impacto se extienda más allá de los muros del campamento.
"Nuestro mayor logro es ver a estos niños y jóvenes convertirse en agentes de cambio en sus comunidades", asegura Elia.
Casa YMCA para Becarios Camohmila sigue siendo un faro de esperanza para quienes más lo necesitan, demostrando que, con educación, valores y oportunidades, el cambio es posible. Donar al programa es más que apoyar una causa; es construir futuros llenos de posibilidades.