Econserve, empresa regia fundada por un holandés

Karim Khayali es un holandés que llegó a México en 2010 a trabajar en una importadora y comercializadora de flores de su país.

Su empleo le brindó un par de conocimientos que serían clave para un emprendimiento que arrancaría años más tarde.

Por un lado, aprender el "know how" de los negocios en Latinoamérica y por otro entender la industria relacionada con el medioambiente.

En 2016, Khayali hizo un viaje a Marruecos, de donde es originario su padre, quería mostrarle la cultura de ese país a su novia de Monterrey, la cual conoció en Toluca.

Esta travesía le serviría para proponerle matrimonio a su actual esposa, pero también para visualizar una oportunidad de negocio.

"Me di cuenta que en las tiendas no daban bolsas, supe que tarde que temprano esta tendencia iba a ocurrir en México", relató Khayali.

Después de dejar su trabajo en el negocio de las flores holandesas y mudarse a Nuevo León, supo que era tiempo de lanzar uno o varios negocios.

Así es como en 2017 nació Econserve, una comercializadora de productos 100% biodegradables como platos, cubiertos, vasos y contenedores.

Actualmente opera bajo el modelo B2B, es decir que comercializa de empresa a empresa, teniendo como clientes a hospitales, hoteles, casinos, restaurantes, escuelas y estadios en todo México.

A su vez trabaja con Biofase y Greenprint, un par de compañías regias que producen estos artículos, además de algunas otras corporaciones estadounidenses.

Tal y como lo visualizó en ese viaje a Marruecos, esta industria ahora está avanzando.

El año pasado, Econserve vendió 100 mil cajas de productos, para 2022 pretende crecer más de 40% a tasa anual.

"Cada vez la gente es más conciente del medio ambiente, las leyes y el tema del agua, usan más desechables sustentables", explicó el ejecutivo.

Además de Econserve, Khayali también es creador de Sinvergüenza, una marca de bóxers biodegradables.