FUNO reconvierte propiedades: Reconversión, nueva oportunidad en el sector inmobiliario

Para la industria inmobiliaria ha sido una época difícil, este sector de la economía ha sido duramente impactado por la crisis generada por la pandemia de COVID-19, de acuerdo con la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) la crisis afectó cerca de 2,000 empresas chicas y medianas de la construcción.

El informe de este año Conociendo la Industria de la Vivienda, que elaboran en conjunto el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (CANADEVI), revela que el Producto Interno Bruto (PIB) de la Industria de la vivienda en comparación con el PIB de toda la economía, registra una participación de alrededor de 6.0%, en los últimos años, lo que muestra la importancia que tiene el sector en la economía del país.

El mismo documento precisa que se trata de una industria que se integra principalmente de dos actividades: la Construcción y los Servicios inmobiliarios, que en conjunto suman 95.3% del total del rubro de la vivienda.

En este escenario, los Fideicomisos de Infraestructura y Bienes Raíces (Fibras) se han convertido en una pieza importante de la industria de la construcción y en especial del sector inmobiliario. En ese panorama destaca FUNO (Fibra Uno), la primera Fibra que debutó en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).

Hoy, FUNO que preside André El-Mann, cuenta con un portafolio de 661 propiedades, las que en conjunto suman cerca de 10.8 millones de metros cuadrados (M2), de esta superficie el segmento Industrial es el de mayor tamaño para FUNO en área bruta rentable (ABR), ya que de ésta forman 53.6% del total, mientras que el comercial representa 26.4%, oficinas 12.1% y 7.8% está conformado por otros.

En ingresos, el segmento comercial aporta la mayoría al representar 37%, seguido del Industrial que ha mostrado un buen comportamiento en la crisis actual y aporta 31% de los ingresos totales de FUNO, en tanto que el de Oficinas 23% y el 9% es aportado por otros, de acuerdo con las cifras del reporte al segundo trimestre de este año.

Ante este contexto, cobra relevancia lo que el CEO de FUNO ha mencionado en reiteradas ocasiones y es que, desde su fundación, ha sido una empresa que se diseñó para que fuera una apuesta a largo plazo y más allá de las crisis que suelen presentarse en las economías por diversas causas, y muestras de la flexibilidad que tiene ha estado trabajando en la reconversión de algunos de sus activos.

Una muestra de la resiliencia de FUNO es la oportunidad que observa en la reconversión de inmuebles, lo que significa atender las necesidades de sus inquilinos con propiedades ya existentes. Por ejemplo, dentro de su portafolio una de las dos torres de un edificio ubicado en La Viga (en la Ciudad de México) que estaba destinado al segmento de oficinas se está transformando para dar servicios como hospital, un proyecto que se concretará en próximos meses.

Otra iniciativa relacionada con esta nueva estrategia de reconversión inmobiliaria a cargo de FUNO, es un desarrollo cerca de Plaza Satélite, en el Estado de México, y que incluye un centro comercial, departamentos residenciales y una torre destinada a oficinas que también será hospital. De acuerdo con la Fibra, el proyecto finalizará en 24 meses.

Esto demuestra la solidez y capacidad de adaptación de FUNO, pues suma otros cinco proyectos con características similares; es decir, en total hará la reconversión de cuatro a vivienda y tres a hospitales.

FUNO cerró el segundo trimestre de este año con un ingreso operativo neto (post apoyos por COVID-19 a sus inquilinos) de 4,241 millones de pesos, una cifra superior en cerca de los 1,000 millones respecto al mismo periodo de 2020. Las cifras indican lo que su CEO manifestó en la presentación de resultados del periodo mencionado: “Mirando a largo plazo, que es la naturaleza de nuestro negocio, estoy seguro de que estamos en el camino de recuperación”.